lunes, 25 de octubre de 2010

Reconocer los derechos de la naturaleza, un imperativo ecológico

Elizabeth Avila, Lunes, 25 de octubre de 2010 a las 10:12

Reconocer a la naturaleza como parte interesada en los conflictos ambientales


Reconocer a la naturaleza como una entidad dotada de derechos es jurídicamente posible, tiene en cuenta una situación real y responde a una necesidad práctica. Así lo sostuve en mi ensayo “La Naturaleza de los Derechos y los Derechos de la Naturaleza”


22 de octubre| Godofredo Stutzin. (1917-2010). Abogado, Presidente Honorario-Fundador, Comité Nacional pro Defensa de la Fauna y Flora (CODEFF) de Chile |AUDIO

(1). La primera versión de este ensayo llevaba todavía un título interrogativo: “La Naturaleza: ¿un Nuevo Sujeto de Derecho?” (2). También se presentó en forma de interrogante una posterior versión abreviada en inglés: “Should we Recognize Nature’s Claim to Legal Rights?” (3). Hoy día, sin embargo, he llegado a la conclusión de que el reconocimiento de los derechos de la naturaleza constituye un imperativo, una verdadera conditio sine qua non, para estructurar un auténtico Derecho Ecológico capaz de frenar el acelerado proceso de destrucción de la biosfera. La plena incorporación de la naturaleza al Derecho en calidad de sujeto se logrará, sin duda, sólo en forma paulatina; por de pronto, basta con establecerla como una meta que ha de señalar el rumbo que debemos seguir.

Cada día es más evidente que, si queremos aspirar a soluciones viables y duraderas de los problemas ecológicos que hemos creado, no podemos seguir ignorando la existencia de una naturaleza poseedora de intereses propios cuya vulneración es la causa de aquellos problemas. Debemos tratar de contrapesar los abrumadores intereses de nuestra sociedad tecnocrática y consumista que colman uno de los platillos de la balanza ambiental, colocando en el otro platillo intereses de la entidad creadora y sostenedora de la vida que es la naturaleza. Para llenar este platillo ya no resultan suficientes intereses más o menos claros de grupos humanos relativamente determinables e identificados en mayor o menor grado con uno u otro aspecto del mundo natural, cuando en el platillo opuesto se han acumulado intereses muy definidos y vigorosos que representan todas las facetas del mundo artificial de la presente era industrial. Tampoco se gana mucho con agregar al contenido del platillo ecológico el “interés público” o “interés general de la sociedad”, toda vez que este interés, además de ser en muchos casos difícil de precisar, puede fácilmente interpretarse como contrario a la protección de la naturaleza por la tendencia prevaleciente de identificar el interés de la humanidad con el de la tecnocracia; con ello se llega a justificar cualquiera aberración, incluso la guerra atómica.

La única manera de equilibrar la balanza y ponderar debidamente las necesidades de la biosfera frente a las pretensiones de la tecnósfera consiste en reconocer a la naturaleza como parte interesada en los conflictos ambientales y permitirle asumir en nombre propio la defensa del mundo natural. El mal funcionamiento de la balanza, que se va acentuando día a día, ha sumido al planeta en la actual crisis ecológica sin precedentes. La gran perdedora no es solamente la naturaleza, sino la propia humanidad cuyos intereses, en definitiva, coinciden plenamente con los de la biosfera por mucho que se quiera hacernos creer lo contrario. Por lo mismo, el reconocimiento de los derechos de la naturaleza, lejos de atentar contra los derechos de los seres humanos, constituye una garantía de que estos derechos sean apreciados en su verdadero significado y alcance y de que sean debidamente resguardados ante las presiones ejercidas por una tecnocracia deshumanizada.

Texto tomado de Ambiente y Desarrollo. VOL. I, N° 1, págs. 97-114, dic. 1984

1.- Presentado al Primer Congreso Nacional de Derecho del Entorno, celebrado en la Universidad Católica de Valparaíso del 18 al 20 de agosto de 1977, y publicado en la revista Atenea (2o semestre de 1978). Una versión alemana se publicó en la revista Rechtstheorie, N° 3, año 1980 (Duncker & Humblot, Berlín, Alemania Federal), bajo el título “Die Natur der Rechte und die Rechte der Natur”.

2.- Leído en las Jornadas del Instituto de Docencia e Investigación Jurídicas sobre “Las Nuevas Figuras Jurídicas Vinculadas a la Protección del Medio Ambiente”, realizadas en Jahuel (7-9 de septiembre de 1973) y, posteriormente, en las Primeras Jornadas Argentinas de Derecho y Administración Ambientales, organizadas por la Asociación para la Protección del Ambiente (Buenos Aires, 15-17 de abril de 1974).

3.- Publicada en la revista Environmental Policy and Law, número correspondiente a septiembre de 1976 (Elsevier Sequoia S.A., Lausanne, Suiza) y en el libro Environmental Problems de W.H. Mason y G.W. Folkers (Auburn University, USA).

http://www.copenoa.com.ar/Reconocer-los-derechos-de-la.html



martes, 19 de octubre de 2010

ley contra el racismo, promulgado por el presidente boliviano Evo Morales

Convergencia de las Culturas celebra la , y que consideramos no sólo democrática sino también histórica.

Puesto que la no-violencia activa y la no-discriminación constituyen el único método coherente para lograr los objetivos de Convergencia de las Culturas, celebramos junto al pueblo boliviano la promulgación de esta ley el pasado 8 de octubre en la Paz, Bolivia. Se trata de una herramienta importante y necesaria para terminar con las prácticas ancestrales de racismo y discriminación en ese país, y un antecedente valioso para otros paìses del continente y del mundo.

Citamos un párrafo del preámbulo de la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia para señalar la dirección mental que inspira al pueblo boliviano a ratificar este nuevo instrumento: “…Dejamos en el pasado el Estado colonial, republicano y neoliberal. Asumimos el reto histórico de construir colectivamente el Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, que integra y articula los propósitos de avanzar hacia una Bolivia democrática, productiva, portadora e inspiradora de la paz, comprometida con el desarrollo integral y con la libre determinación de los pueblos…”

Deseamos de todo corazón el cumplimiento de estos anhelos que trazan el rumbo al nuevo mundo que todos los habitantes de este planeta necesitamos y al que todos debemos aportar desde la perspectiva de tratar a los demás como queremos ser tratados.

Fernando Ayala
Equipo internacional ideológico de Convergencia de las Culturas

domingo, 17 de octubre de 2010

LA POBREZA MARCA EL HORIZONTE DE LOS DERECHOS HUMANOS

Para más información contacte con la oficina de prensa de Amnistía Internacional en Santiago de Chile, al Tel. 02-235-5945 info@amnistia.cl

17 de Octubre Día Internacional para la erradicación de la pobreza

La pobreza es una de las peores crisis de derechos humanos del mundo y para Amnistía Internacional no se trata solamente de un problema de recursos económicos o de mala distribución de la riqueza: lo que está en juego es el acceso universal a derechos básicos de salud, justicia, educación, trabajo y seguridad humana.

En Chile, más del 15% de la población es pobre: una de cada siete personas sufre abusos o violaciones de Derechos Humanos. Niños y niñas, pueblos originarios, mujeres jefas de hogar, son algunas de las personas más desprotegidas y que viven bajo el impacto de la pobreza.

Amnistía Internacional pide a Chile y a todos los Estados que presten atención al cumplimiento efectivo de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), la iniciativa mundial más prominente destinada a erradicar la pobreza, adoptada hace 10 años por todos los estados miembros de las Naciones Unidas. Estos objetivos representan el compromiso suscrito al más alto nivel político, para mejorar las condiciones de vida de millones de personas.

Los ODM se centran en ocho áreas: erradicación de la pobreza extrema; enseñanza primaria universal; igualdad y empoderamiento de la mujer; reducir la mortalidad infantil; mejorar la salud materna; combatir el VIH/Sida y otras enfermedades; garantizar la sostenibilidad del medio ambiente; y fomentar una alianza mundial para el desarrollo.

La vulneración de derechos por parte de los Estados, la ausencia de rendición de cuentas, y la represión de la libertad de quienes exigen el cumplimiento de los derechos humanos, y las restricciones a la participación activa de las comunidades tiene un efecto devastador entre quienes viven en la pobreza. Todas las personas deben poder exigir en igualdad de condiciones el cumplimiento de sus derechos humanos. Se ha visto también la violación de estos mismos derechos por empresas y grupos económicos, en algunas circunstancias con el conocimiento de los Estados que tienen la obligación de proteger los derechos humanos de todos.

Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza:

En diciembre de 1992, la Asamblea General de la ONU reconoció oficialmente el 17 de octubre como Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza. En su Observancia del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, de 2006, la Asamblea General de la ONU consideró que este día es una importante ocasión para movilizar a personas, coordinar acciones, alinear recursos y reconocer la trascendencia que tiene la participación de quienes viven en la pobreza para alcanzar el éxito.

Equipo de Prensa & Medios
Amnistía Internacional - Chile
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